En un día mágico como el de hoy, ya están llegando los Reyes Magos, os dejo una pequeña reflexión a raíz de una noticia que me llegó hace unas semanas junto con el Reporte semanal de innovación educativa del Observatorio de Innovación Educativa que recibo desde el Tecnológico de Monterrey (Ciudad de México).
Del 14 al 15 de diciembre del ya pasado 2015, se celebró en el Tecnológico de Monterrey (México) la segunda edición del Congreso Internacional de Innovación Educativa (CIIE), «Transformando la educación para los retos del futuro». Entre otras ponencias, paneles, presentaciones, ferias y conferencias, destacó la conferencia de Thomas Magnanti, actualmente presidente de la Universidad de Tecnología y Diseño de Singapur (SUTD) , establecida en colaboración con el Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT).
Thomas Magnanti es Ingeniero Químico de profesión y pionero en la filosofía educativa que combina la ingeniería y administración. Es por ello que no extraña el hecho de que la SUTD se fundara con el propósito de “avanzar en el conocimiento y fomentar líderes técnicamente fundamentados e innovadores para satisfacer las necesidades de la sociedad”. Y aquí llega mi primera reflexión: que una universidad sea creada para avanzar en el conocimiento es algo que cualquier universidad que se precie tiene entre sus finalidades, ahora bien, que a ello se le añada el fomento de líderes, no sólo competentes desde un punto de vista técnico sino también desde la innovación, aún está mejor. Es más, todo mejora cuando se sazona todo ello con el afán por satisfacer las necesidades de la SOCIEDAD, y yo diría, sean éstas las que sean.
De la ponencia de Thomas Magnanti destaco, entre otros, los siguientes aspectos*:
- La importancia de promover la innovación en los modelos educativos para brindar a las nuevas generaciones nuevos estilos de aprendizaje mejor adaptados a sus circunstancias. Yo entiendo esto como una educación más personalizada (no individualizada) y adaptada a las nuevas generaciones, mucho más preparadas desde el punto de vista tecnológico que las nuestras. Y en la misma línea, una educación basada en modelos formativos más innovadores donde, por fin, los alumnos sean los grandes protagonistas de su desarrollo, personas activas y participativas con las características propias de la persona emprendedora.
- Tres de los ingredientes esenciales de la educación: conocimientos, habilidades y actitudes. Según mi opinión, esto es reflejo de la educación basada en competencias por la que abogamos y en la que estamos trabajando en los últimos años en Europa y en Latinoamérica en las distintas universidades y centros educativos.
- Algunas de las habilidades y actitudes más importantes para el desarrollo y la educación de los estudiantes son la creatividad, el descontento con el ‘status quo’, la curiosidad, la pasión, la habilidad para identificar buenas ideas y venderlas y la voluntad de asumir riesgos. No puedo más que estar más que de acuerdo con nuestro protagonista de hoy, pues con estas competencias que señaló en su conferencia, se está subrayando la importancia de la persona emprendedora.
- La importancia de utilizar metodologías de aprendizaje innovadoras como las comunidades de aprendizaje. Reconozco que el uso de esta metodología, junto con el aprendizaje-servicio o el aprendizaje basado en proyectos se han convertido en instrumentos esenciales para el desarrollo de las competencias básicas en nuestros alumnos.
- El trabajo en equipo, donde los alumnos se ven obligados a defender sus diseños, el desarrollo de habilidades de comunicación específicas y de habilidades de negocio, y, en definitiva, involucrar a los alumnos en su desarrollo son elementos esenciales para una educación que funciona.
- Porque, lo que defiende Thomas Magnanti (y no sólo él) es que los profesores y los alumnos han de crear magia y que hemos de buscar alumnos que tomen riesgos, que sean aventureros, con sentido de espíritu. ¿Qué más se puede pedir?
Acabo este post como comenzó Thomas Magnanti su conferencia:
Si pudieran crear una universidad desde cero, para el presente y para el futuro, ¿qué harían?
Soñemos un poco y hagamos por conseguirlo.
Disfrutad de esta noche tan especial y que el resto de noches del 2016 sean igual de mágicas.
*Encontraréis la noticia completa en el siguiente enlace: Liderazgo e Innovación, son los ingredientes que toda universidad debe tener